LOS TRATAMIENTOS ESTÉTICOS MÁS POPULARES Y EJERCICIO CLAVE PARA TENER MEJORES RESULTADOS
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Cada vez son más las personas que acuden a tratamientos estéticos como una vía para mejorar su imagen corporal y bienestar emocional por lo que la importancia de practicar deporte antes y después del tratamiento cobra una importancia capital. Procedimientos como la liposucción, la abdominoplastia o incluso las intervenciones faciales como la rinoplastia o el lifting han dejado de ser un tabú, y forman parte del repertorio habitual de muchas clínicas de estética de referencia. Sin embargo, es importante entender que estas intervenciones no sustituyen un estilo de vida saludable, sino que pueden verse enormemente potenciadas si se acompañan de una estrategia de entrenamiento físico y deport adecuada y sostenible. Tal y cómo el DR Josep M. Ribas dice en este articulo.
Desde Aura, queremos explicarte cómo el ejercicio o el deporte no solo te ayuda a mantener los resultados de estos procedimientos, sino que también mejora tu salud general, tu autoestima y tu calidad de vida.
Liposucción: consolidar la pérdida de grasa con entrenamiento funcional y fuerza
La liposucción es una intervención quirúrgica que permite eliminar acúmulos de grasa localizada que son resistentes a la dieta y al ejercicio. Aunque los resultados pueden ser impactantes, el riesgo de volver a acumular grasa en otras zonas existe si no se modifica el estilo de vida.
Aquí es donde el ejercicio y el deporte juegan un papel clave. Entrenamientos de fuerza combinados con trabajo aeróbico de moderada a alta intensidad (como el HIIT o el cardio en zona 2) son especialmente útiles para mantener el porcentaje de grasa corporal bajo. Además, el entrenamiento de fuerza ayuda a mejorar la composición corporal al incrementar la masa muscular, lo cual se traduce en un metabolismo basal más elevado.
Desde el punto de vista fisiológico, el movimiento también estimula el sistema linfático, favoreciendo el drenaje de líquidos y la eliminación de toxinas postquirúrgicas, mejorando la circulación y reduciendo el riesgo de edemas o fibrosis.
Abdominoplastia: reeducar el core para una recuperación funcional
La abdominoplastia es uno de los tratamientos más demandados tras grandes pérdidas de peso o embarazos. Se trata de una cirugía que elimina el exceso de piel y, en muchos casos, repara la diástasis de los rectos abdominales.
En estos casos, una vez completado el periodo postoperatorio y con la aprobación médica, es crucial iniciar un programa progresivo de fortalecimiento del core, comenzando por ejercicios hipopresivos, control motor y activación del transverso abdominal, y evolucionando hacia ejercicios más funcionales y exigentes como planchas, puentes o trabajo con bandas.
Este tipo de entrenamiento no solo ayuda a recuperar el tono muscular abdominal, sino que también previene dolores lumbares, mejora la postura y contribuye a una mejor gestión de la presión intraabdominal, algo esencial tras una cirugía mayor en la zona.
Rinoplastia y lifting facial: el ejercicio como modulador del bienestar emocional y recuperación global
Aunque parezca que estos procedimientos tienen poco que ver con el entrenamiento, la realidad es distinta. Tanto la rinoplastia como el lifting facial están profundamente ligados a la percepción de la imagen corporal y la autoestima. Aquí, el ejercicio puede actuar como un modulador del estado de ánimo y un complemento al proceso de recuperación psicológica y física.
La actividad física regular se asocia con la liberación de endorfinas y serotonina, sustancias clave para el equilibrio emocional. Además, mantener una rutina saludable genera sensación de control y autoconfianza, dos aspectos esenciales cuando una persona pasa por un cambio estético visible.
En cuanto a lo físico, ejercicios de bajo impacto como el yoga, el pilates o el entrenamiento de movilidad pueden ser grandes aliados durante las primeras semanas postoperatorias, ayudando a mejorar la circulación y reducir la inflamación facial de forma natural.
Una mirada integral: más allá de la estética
Los tratamientos estéticos pueden ser un excelente punto de partida para muchas personas, pero si no se acompañan de un cambio profundo en los hábitos diarios, sus beneficios pueden verse limitados en el tiempo. El ejercicio no solo ayuda a mantener los resultados, sino que amplifica sus efectos a través de múltiples mecanismos fisiológicos y emocionales.
En Aura trabajamos para que el entrenamiento se convierta en una herramienta poderosa de bienestar, adaptándonos a las necesidades y fases de cada persona, especialmente cuando hay intervenciones estéticas de por medio. Si has dado el paso de cuidar tu cuerpo por fuera, te animamos a hacerlo también desde dentro. Tu salud, tu energía y tu autoestima te lo agradecerán.